Los Estelares abrieron el último día del Quilmes Rock, en una jornada algo complicada debido al clima, pero afortunadamente, ni bien comenzó la música asomó febo y por ahora para despejarse el asunto.
Ante un muy buen marco de público, teniendo en cuenta la hora –sobre todo- Los Estelares ofrecieron un set compacto con muchas de sus mejores canciones con una lista de temas acomodada para la ocasión. Abrieron con Aire, acaso su canción más conocida, América y Un Show.
También fueron parte del set Melancolía, Cristal y Tanta Gente. El cierre, como es habitual en estas ocasiones fue con Día Perfecto.
La Mancha de Rolando. Está claro, el clima de hoy no es el mejor para vivir un recital de rock.
Frío, un poco de lluvia y charcos por todos lados. Pero poco les importa todo esto a las más de 15 mil personas (y a las miles más que hacen cola afuera por entrar al predio) que ya se acercaron al predio de GEBA para vivir el Quilmes Rock 2011, y ver a la segunda banda que se presentó en el escenario principal: La Mancha de Rolando.
Son una fija en los festivales, de eso no hay dudas, y esto hace que tengan más que claro como calmar a la fieras que llegan a este tipo de eventos para escuchar sólo cuarenta minutos de sus banda preferidas: hits, hits y más hits.
Buscar y Ese Tren fueron los dos primeros temas en sonar del set list de La Mancha. Un homenaje al rock inglés con un medley de Satisfaction de los Stones y Páginas el cover que hicieron de Bob Dylan fue lo que siguió en esta tarde fría y húmeda de Quilmes Rock.
Una versión power de Chino sonó antes de que Gillespi se subiera al escenario para hacer junto a La Mancha Cabrón y La Planta.
La Mancha de Rolando ¨Arde la ciudad¨
El final fue a todo trapo con sus clásicos Calavera, Arde la Ciudad y Antes. Así, la Mancha se despidió del Quilmes Rock 2011.
KAPANGA. 18:02 explota GEBA mientras sonaba la melodía de Los Expedientes Secretos X, el quinteto hizo pie en el escenario principal y la gente desplegó cotillón, papelitos y globos para recibir a los animadores de la fiesta.
Porque eso es Kapanga. Fiesta garantizada, con matices, recursos y un Miguel De Luna Campos que se luce con su guitarra y rockea en cada solo.
El Mono, intratable como siempre, bailó, se metió entre la gente, cantó, arengó y hasta dio una clase de masturbación masculina. Maffia en la batería y Memo desde el bajo son imparables y llevan siempre la banda hasta el extremo.
Con el Mono gritanndo ¨Linda noche para quemar un Calamaro y recoradndo a Cerati ¨No perdemos las esperanzas que un dia se despierte y nos diga Gracias Totales.¨
El universal y Miro de atrás fueron las que desataron la fiesta. La cuota verde la pusieron Fumar y Ramón. En el camino y El albañil completaron un set que tuvo la trilogía imbatible del final con Me mata, Rock y El mono relojero.
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