Madonna fue demandada por un grupo de activistas rusos por 10,5 millones de dólares, luego que desafiara la prohibición del orgullo gay en San Petersburgo, la semana pasada, informaron fuentes locales.
Miembros de la conservadora Unión de Ciudadanos Rusos y de New Great Rusia demandaron a la "Reina del pop" por "daño moral".
"Demandamos que ella pague por el daño que sufrieron los residentes de San Petersburgo como resultado de sus acciones durante el show del 9 de agosto", informó un vocero de la Unión de Ciudadanos Rusos. "Debemos defender nuestros derechos a tener una vida cultural normal, sin propaganda de valores y puntos de vista que contradicen la cultura rusa", agregó.
El abogado que representa a los grupos rusos, Alexander Pochuyev, dijo que "el estrés emocional y el shock emocional" lo sintieron quienes asistieron al concierto.
En el concierto que brindó en San Petersburgo, Madonna reclamó que "la comunidad gay debe ser tratada con respeto, tolerancia y amor".
"Estamos aquí para luchar por el derecho a ser libres", le gritó a la multitud en el estadio SKK, donde actuó como parte de su "MDNA Tour".
La estadounidense había aparecido en un recital con una leyenda en su espalda que decía simplemente "Pussy Riot", en alusión a la banda punk rusa cuyas tres integrantes fueron condenadas a dos años de prisión por vandalismo motivado por odio religioso, debido a que cantaron una plegaria contra el presidente Vladimir Putin en la catedral de Cristo Salvador.
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