A los 63 años, Héctor “Pomo” Lorenzo comanda desde la batería, la misma que nutrió músicas de Invisible, Spinetta Jade, Fito Páez y Pedro Aznar, entre otros, las canciones del exquisito álbum “Binario” que registró junto al cuarteto El Don y que presentará hoy miércoles desde las 21 en el local porteño Velma Café.
A tres años de su demorado lanzamiento con “Primario”, el músico y maestro de bateristas defendió su pertenencia al rock aunque señaló que hoy día “hay 2000 autobuses pero parece que todos tienen que pasar por el mismo peaje”.
“Para nosotros sería un gran aporte poder estar en festivales si es que de verdad son festivales de rock y se animan a llamarnos”, desafió Pomo durante una entrevista con la agencia Télam.
Capaz de apelar a sentencias y metáforas, el músico que también tocó en Los Abuelos de la Nada y Pappo's Blues, describió que “yo estoy creando encerrado en mi submarino y dispuesto a ir a donde sea, pero ya no sé si quedan mares para cruzar”.
“El estadío del rock actual contiene mucha ambigüedad, desorden y desorientación y, por eso, la camada que fundó este género puede asumir la vanguardia desde una vuelta de tuerca a lo hecho”, reflexionó.
El instrumentista que fue bastión del sonido rockero de los '70 y los '80 en el escena local, especificó que “no siento nostalgia porque la nostalgia pertenece al pasado y yo soy un fóbico, pero sí extraño la sana competencia por sonar bien y sentir que éramos varios en la misma onda”.
“Binario” consigue actualizar aquellas búsquedas sin tiempo a partir de un repertorio casi íntegramente con su firma que parte del rock y recurre a estimulantes cruces.
Junto a El Don (Pablo Suárez en bajo eléctrico, Javier Viñas en guitarras y Guillermo De Medio en teclados), más los aportes vocales de los cantantes Diego Mercado y Damián Oliver, el álbum es una acabada muestra de las posibilidades expresivas del género.
Para “Binario”, Pomo compuso “Amor propio”, “Comoasomas”, “Polvo de estrellas”, “Chacrarero”, “Alamar”, “Binaria pasajera” y “Lucky loser”, compartió con Suárez y Viñas la autoría de “Al cielo ciego” y “Lo + poco” y sumó los aportes de Suárez en “BAjungle” y de Viñas para “Ciruja”.
“Siento que hicimos un gran trabajo que habla por sí mismo y es un digno continuador de lo que asomaba en 'Primario' y logra superar aquella experiencia”, apuntó comparando el flamante registro con el publicado en 2010.
En la retiración de tapa del álbum independiente, el artista escribió “en memoria de Don L.A. Spinetta”, un breve texto que dice: “La ceguera al cambio deja ver la cualidad principal del guerrero, cambiar a ciegas para poder ver” y desde esa misma percepción, añadió que “seguir batallando se explica desde el lado del guerrero. Lo tengo hecho carne, es una condena, un compromiso inalterable”.
“Por eso -se ufanó el baterista- yo no dejo de escapar de la repetidora y apuesto a seguir haciendo música”.
A partir de esa imagen traducida en palabras, sostuvo que “el camino que he construido con los grandes compositores a los que me uní a partir de una elección selectiva y de una entrega incondicional, es la misma que siento con los integrantes de El Don”.
“Para trabajar en una banda y generar un hecho artístico tiene que haber esa esfera, esa cooperativa”, propuso el baterista para quien tocar obra propia o de sus admirados y escogidos compañeros “me genera algo igualmente fuerte”.
Pomo se mostró dispuesto a repartir su presente sonoro entre “Binario” y otros “incondicionales de la vida”, entre los que citó a Fito Páez y a Pedro Aznar y enseguida resaltó que “el listón más alto de todos, la estela más grande, me la marcó Luis (Spinetta)”.
La referencia a esos autores, apenas tres de una actividad profusa y reconocida, llevó a que el músico anunciara que el material “Histórico”, que resume su tránsito musical, “está en proceso desde hace rato”.
“Es un trabajo muy extenso y casi documental ya que reúne documentos históricos y cronológicos”, prometió acerca de lo que significará “Histórico”
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